No sé dónde cojones estarás metido ni qué tipo de tren de vida llevarás ahora. Espero que al menos sea un tren, con sus vagones, sus ferrocarriles, sus largas distancias y todo eso. Lo que sea, menos un tranvía de mierda.
No sé qué pondrán en la tele en el año 2022 o vete tú a saber, pero recuerda que The Wire siempre ha sido y será la mejor serie de toda la jodida historia. No te dejes engañar por los artificios hollywoodienses de la época ni por las pelis de A Todo Gas, que ya deberán andar por la vigésimo quinta entrega y con los vehículos equipados con motores de turbohélice de doble flujo y sistemas de propulsión anti-gravitacional.
Me gustaría empezar por comentarte que si todavía vives en Tenerife, sería un buen momento para ir a la farmacia y comprar un frasco de warfarina en comprimidos. Es un anticoagulante inodoro que se usaba antiguamente para reventarle los órganos internos a las ratas. Si todavía resides en la isla, ventílate de golpe el frasco entero.
También espero que te escuches más a ti mismo. En el periodo actual no lo haces suficientemente. Hablo de apartarte del “ruido” que hacen los demás con sus opiniones sesgadas y juicios de valor sin valor. Solamente impermeabilizándote de la estridencia externa y escuchando a ese melocotón palpitante que tienes incrustado en tu puñetera cavidad torácica, lograrás reconocer, si no lo has hecho ya, lo que realmente necesitas para tu satisfacción individual, que a fin de cuentas es la que importa.
Está muy bien ser benévolo y compasivo con otras personas, pero procura no invertir demasiado en algunas, porque querrán nutrirse del zumo de ese melocotón palpitante y al final te quedarás con una simple pipa desecada y endurecida. Pero eso ya lo habrás comprobado a estas alturas.
Nunca descuides a esa gente irreprochable que te proporciona afecto y lealtad. Aunque estés viviendo en Papúa-Nueva Guinea rodeado de entrañables marsupiales arborícolas no descuides a esa gente, pero deshazte de los que no aportan nada o traten de contaminar tu bienestar. Ten cerca a las personas sabias e inteligentes, pero no olvides que no necesitas amigos nuevos, eso déjaselo a los chichis.
Recuerda también que no tienes por qué caerle bien a nadie. Más o menos siempre has tenido presente esta idea, pero como es uno de tus principales aciertos existenciales, creo que siempre es conveniente mencionarlo para que se perpetúe en el tiempo hasta tu lecho de muerte. Intentar caer bien a los demás y generar simpatía en cada puñetero ser humano del mundo te hace un falso; en consecuencia consigues amigos falsos, te envuelves paulatinamente en una nauseabunda ciénaga de falsedad, y al final acabas completamente atrapado en un bucle falsicida donde tu único amigo es un muñeco de trapo del LittleBigPlanet.
Escucha atentamente a los demás, aunque a veces sólo digan gilipolleces. Luego se las cuentas a Airton y te partes la caja con él.
Nunca hagas nada que no te guste durante demasiado tiempo. Tu presencia en el mundo es demasiado corta para estar bajo el yugo de nadie, o estar atado a obligaciones incómodas que no tendrán ningún beneficio real para tus intereses o los de tu gente. Lo que quiero decir, más o menos, es que procures ser feliz, sonreír y toda esa mierda. Hay días en los que eres un auténtico engendro sollozante, pero te haré una pequeña revelación: sonreír es una sana manifestación emocional que no exige contraprestación económica. Vamos, que es gratis, cacho de maricón.
Para ir finalizando esta misiva; decirte que si estás casado, viviendo con alguien o si tienes un vínculo conyugal de cualquier tipo…recuerda que no puedes estar reventando los muebles de tu casa sólo porque pierdas en un videojuego (si es que en el futuro todavía hacen videojuegos decentes, que lo dudo). Ya sé que te va a molestar leer esto, y ya sé que el haber comprado esa mecedora de mimbre te da derecho a enfondarla a puñetazos (siguiendo tu tradicional ley del “yo lo pago, yo lo rompo”), pero debes evitar que tu pareja descubra que eres un maníaco-compulsivo-ultraviolento y te deje. Sólo es una recomendación.
Bueno, creo que eso es todo. Saludos desde el pasado.
PD: Los hombres del mañana, vaya hijos de puta.
No sé qué pondrán en la tele en el año 2022 o vete tú a saber, pero recuerda que The Wire siempre ha sido y será la mejor serie de toda la jodida historia. No te dejes engañar por los artificios hollywoodienses de la época ni por las pelis de A Todo Gas, que ya deberán andar por la vigésimo quinta entrega y con los vehículos equipados con motores de turbohélice de doble flujo y sistemas de propulsión anti-gravitacional.
Me gustaría empezar por comentarte que si todavía vives en Tenerife, sería un buen momento para ir a la farmacia y comprar un frasco de warfarina en comprimidos. Es un anticoagulante inodoro que se usaba antiguamente para reventarle los órganos internos a las ratas. Si todavía resides en la isla, ventílate de golpe el frasco entero.
También espero que te escuches más a ti mismo. En el periodo actual no lo haces suficientemente. Hablo de apartarte del “ruido” que hacen los demás con sus opiniones sesgadas y juicios de valor sin valor. Solamente impermeabilizándote de la estridencia externa y escuchando a ese melocotón palpitante que tienes incrustado en tu puñetera cavidad torácica, lograrás reconocer, si no lo has hecho ya, lo que realmente necesitas para tu satisfacción individual, que a fin de cuentas es la que importa.
Está muy bien ser benévolo y compasivo con otras personas, pero procura no invertir demasiado en algunas, porque querrán nutrirse del zumo de ese melocotón palpitante y al final te quedarás con una simple pipa desecada y endurecida. Pero eso ya lo habrás comprobado a estas alturas.
Nunca descuides a esa gente irreprochable que te proporciona afecto y lealtad. Aunque estés viviendo en Papúa-Nueva Guinea rodeado de entrañables marsupiales arborícolas no descuides a esa gente, pero deshazte de los que no aportan nada o traten de contaminar tu bienestar. Ten cerca a las personas sabias e inteligentes, pero no olvides que no necesitas amigos nuevos, eso déjaselo a los chichis.
Recuerda también que no tienes por qué caerle bien a nadie. Más o menos siempre has tenido presente esta idea, pero como es uno de tus principales aciertos existenciales, creo que siempre es conveniente mencionarlo para que se perpetúe en el tiempo hasta tu lecho de muerte. Intentar caer bien a los demás y generar simpatía en cada puñetero ser humano del mundo te hace un falso; en consecuencia consigues amigos falsos, te envuelves paulatinamente en una nauseabunda ciénaga de falsedad, y al final acabas completamente atrapado en un bucle falsicida donde tu único amigo es un muñeco de trapo del LittleBigPlanet.
Escucha atentamente a los demás, aunque a veces sólo digan gilipolleces. Luego se las cuentas a Airton y te partes la caja con él.
Nunca hagas nada que no te guste durante demasiado tiempo. Tu presencia en el mundo es demasiado corta para estar bajo el yugo de nadie, o estar atado a obligaciones incómodas que no tendrán ningún beneficio real para tus intereses o los de tu gente. Lo que quiero decir, más o menos, es que procures ser feliz, sonreír y toda esa mierda. Hay días en los que eres un auténtico engendro sollozante, pero te haré una pequeña revelación: sonreír es una sana manifestación emocional que no exige contraprestación económica. Vamos, que es gratis, cacho de maricón.
Para ir finalizando esta misiva; decirte que si estás casado, viviendo con alguien o si tienes un vínculo conyugal de cualquier tipo…recuerda que no puedes estar reventando los muebles de tu casa sólo porque pierdas en un videojuego (si es que en el futuro todavía hacen videojuegos decentes, que lo dudo). Ya sé que te va a molestar leer esto, y ya sé que el haber comprado esa mecedora de mimbre te da derecho a enfondarla a puñetazos (siguiendo tu tradicional ley del “yo lo pago, yo lo rompo”), pero debes evitar que tu pareja descubra que eres un maníaco-compulsivo-ultraviolento y te deje. Sólo es una recomendación.
Bueno, creo que eso es todo. Saludos desde el pasado.
PD: Los hombres del mañana, vaya hijos de puta.
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